Recorra el corazón de Boire de Bre durante unas horas. Observe los animales al borde del agua. No se lo pierda.
Para tener un buen despertar, disfrute del baño a primera hora de la mañana en el hidromasaje natural del molino de Bre.
Si le gusta pescar, no se olvide de su caña, aunque podemos prestársela nosotros.
El bosque de más de cuatrocientas hectareas. que rodea la mansión, invita a pasear alrededor de los lagos y del hipódromo. Por la noche podrá escuchar el croar de las ranas.
Las agencias ofrecen numerosos circuitos. Algunas ofrecen estancias de una semana, incluyendo alquiler de bicicletas, media pensión, dos ó tres habitaciones y dos traslados en taxi para transportar su equipaje.
Nosotros le proponemos quedarse unos días y disfrutar de las diferentes cascadas.
Los niños disfrutarán del aire libre. Es un buen momento para acercarse a las estrellas y tocarlas con la mano.